Manifiesto completo de la Asociación.
Con motivo de la aprobación el día 24 de septiembre de 2012 por el pleno del Ayuntamiento de las nuevas tasas por las mediciones sonométricas realizadas por la Policía Local a petición de los ciudadanos cuando éstas fueren negativas deseamos realizar las manifestaciones:
- No estamos de acuerdo con la política impuesta en la ciudad en materia de contaminación acústica.
- Nuestra disconformidad con la reciente tasa aprobada por el Pleno por la realización de mediciones acústicas por la Policía Local en los términos de su redacción definitiva. Nuestra intención es recurrirla, pues la tasa tiene un fin político de bendecir al sector del ocio y la hostelería.
- El fin no justifica los medios. Incentivar el turismo y el ocio en la ciudad, no tiene porqué atentar (como se está haciendo) contra el descanso de los vecinos y su calidad de vida. Se está destruyendo el modelo de ciudad apacible de la que siempre hemos disfrutado. El Ayuntamiento tiene la obligación por ley de comprobar, controlar e inspeccionar que las actividades realizadas en el Municipio se ajusten a la normativa del ruido y en su caso adoptar las medidas adecuadas y necesarias en el ámbito administrativo para que cese el exceso de ruido.
- Como Cuerpo de Seguridad del Estado, la Policía Local tiene competencia en la ciudad para realizar mediciones acústicas y verificar el cumplimiento de la normativa. Si las mediciones son positivas, se está cometiendo un delito medioambiental. Ante una denuncia de un vecino se tiene la obligación de investigar y comprobar cuantas veces sea necesario si se cumple la normativa con independencia de los resultados que alcance dicha medición.
- Desgraciadamente desde nuestras experiencias personales podemos afirmar que aunque se estén sufriendo graves molestias por el ruido para que una medición acústica sea positiva influyen múltiples factores: como el ruido de fondo o ambiental exterior, las condiciones atmosféricas, o incluso los tonos de la canción que está sonando en ese momento, e incluso el tiempo y dedicación que la Policía invierta en la obtención de muestras y sobre todo que en ese momento no sea visto por los responsables del local causante del ruido. Factores todos ellos que determinan el límite o estrecho margen para que resulte positiva o negativa una medición.
- El ciudadano que denuncia un ruido no es adivino. Por tanto, le es imposible a priori en su condición humana saber si la medición dará positiva o no (si tendrá que pagar la tasa o no ), a pesar de tener molestias que le impiden descansar. Con la nueva normativa si el vecino se arriesga y decide denunciar y solicitar una medición puede ocurrir en esos momentos que por la confluencia de los factores antes mencionados la medición resulte negativa y tenga que pagar la tasa y seguir soportando el ruido a expensas de arriesgarse otra vez más y tener que pagar más y más.
- Pensamos que se está disuadiendo al ciudadano para que no denuncie y se están poniendo dificultades y trabas en la obtención de la prueba de unos hechos que vulneran los derechos fundamentales de la persona.Es evidente que quién no tiene poder adquisitivo jamás se va a plantear a denunciar y llamar a la policía porque si por cualquier circunstancia imposible de controlar la medición es negativa, le sancionan con el pago de una tasa de escala creciente y encima se queda soportando el ruido en su casa.
- No nos gusta Elche cuando se está perdiendo en calidad de vida, en el derecho a la intimidad, a la salud y al descanso de los ilicitanos.
- Primero se aprobó la Ordenanza de veladores que trasladó el ejercicio de las actividades a las calles de dominio público contaminando de ruido nuestra cuidad y no pudiendo disfrutar del paseo por las calles que se cortaron al tráfico para convertirse en peatonales.
- Después se regula una nueva ordenanza de contaminación acústica que deroga las zonas con efectos acumulativos del barrio de la Zapatillera , Zona Centro y Altabix, desprotegiendo al ciudadano y legalizando a posteriori los incumplimientos de hecho que desde hace tiempo se estaban produciendo sobre todo en la Zona Centro y que en el año 2011 ya se denunció por multitud de vecinos y que el Ayuntamiento no se molestó ni en contestar.
- Esta nueva ordenanza se ha elaborado a espaldas de los vecinos y asociaciones representativas de nuestra ciudad sin tener en cuenta las alegaciones presentadas.
- Actualmente se ha interpuesto un recurso CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO ante el tribunal Superior de Justicia de Valencia contra la misma que se podía haber evitado si se hubiera consensuado.
- Por último se crea una tasa de efectos disuasorios y que penaliza a quien sufre y denuncia en el caso de una medición negativa del nivel sonométrico.
- La propuesta finalmente aprobada en el Pleno es improcedente, pues el remedio no es imponer una tasa sino dotar de medios suficientes y necesarios a la sección de sanidad de la Policía Local para que pueda realizar las mediciones cuando sean solicitadas.
SOLICITA: LA DIMISIÓN del CONCEJAL DE EMPLEO y APERTURAS y LA INMEDIATA REVOCACIÓN DE LA TASA.
Llamamos a una implicación activa y responsable de todos nuestros representantes políticos que sirva para mejorar y rectificar la hasta ahora nefasta política del Ayuntamiento desarrollada en materia de ruido continuista de la Corporación anterior.
FDO: Asociación de Afectados por el Ruido de Elche